Al fin está pasando: en febrero 15 de 2018, el navegador Google Chrome bloqueará algunos anuncios (sin tener que descargar alguna extensión), independientemente si tienes algún otro bloqueador de anuncios instalado.
Eso significa que Google, una de las compañías publicitarias más grandes del mundo, comenzará a decidir qué anuncios serán bloqueados en tu navegador. ¿Deberían los usuarios estar felices de eso, o preocupados por lo que Google está tramando?
Algo como esto era necesario
Google no está bloqueando todos los anuncios: sólo los bloqueará en las páginas que se “portan mal”. En la entrada de blog anunciando el cambio, Google declaró que bloquearán todos los anuncios en los sitios que tienen una cierta cantidad de anuncios que viola los estándares de la “Coalition for Better Ads” (Coalición para una mejor publicidad). Esta coalición incluye a compañías tecnológicas como Google, Microsoft y Facebook. Otras compañías de medios como “The Washington Post” y “Reuters” son parte de esta coalición. Juntos, han construido una lista de tipos de anuncios que consideran inaceptables. Cualquiera que navega la web regularmente debería reconocer a los culpables: Popups, anuncios de video que se reproducen solos con sonido, y otros serán bloqueados.
Este tipo de anuncios hacen que navegar la web se sienta miserable, y todos estaríamos mejor si estos desaparecieran. Pero es improbable que los editores hagan esta decisión unilateralmente: este tipo de anuncios paga bien, y es difícil resistirse a ese dinero extra desde el punto de vista de una organización de medios que tiene problemas para mantenerse a flote.
Así que Google ha decido forzar el conflicto.
A partir del 15 de febrero, las versiones para escritorio y móviles de Chrome bloquearan todos los anuncios en los sitios que usan este tipo de publicidad. Es difícil predecir que tan devastador esto será para los sitios que serán bloqueados: Chrome es usado por más del 60 porciento de usuarios de desktop y móvil. Los editores han tenido por lo menos un año para asegurarse de que sus sitios cumplen con el estándar, y esto es una motivación seria para que realmente lo hagan si aún no lo han hecho.
Es fácil ver la ventaja de este desarrollo. Tú, como usuario, podrás navegar la web sin ver este horrible tipo de anuncios- ya sea porque los sitios web se deshagan de ellos, o porque serán bloqueados por Chrome. Sin algún tipo de intervención, este tipo de publicidad simplemente se haría más común, haciendo el internet un peor lugar para todos.
Pero también hay una posible desventaja. Google, la compañía más grande de publicidad, bloqueará anuncios para controlar el comportamiento en sitios de los que no son dueños. Sea cual sea tu opinión sobre Google, eso es mucho poder.
Esto no es totalmente sin precedentes
Esta no es la primera vez que algo como esto ha sucedido. Las grandes compañías de tecnología constantemente han modificado los navegadores web para poder moldear la web a su gusto, y los resultados frecuentemente han sido positivos.
Por ejemplo, es conocido el caso de Apple que no quiso implementar Flash en el iPhone. Podría decirse que esta decisión indirectamente llevó a los desarrolladores a crear el HTML5 para usarse en internet, lo cual fue una gran mejora. Los primeros bloqueadores de Popups, implementados como parte de Mozilla Firefox e Internet Explorer, sin lugar a duda dañaron los ingresos de organizaciones publicitarias a comienzos del año 2000. Este cambio redujo el estrés que provocaban este tipo de anuncios, y debido a esto ahora son mucho menos comunes que antes. Recientemente, el sistema operativo High Sierra implemento una función para prevenir el rastreo, la cual borra las cookies regularmente para reducir el rastreo en línea.
Google también ha actuado similarmente en el pasado. Chrome ya bloquea anuncios de audio automáticos y el Flash está desactivado por defecto. Es fácil interpretar que el siguiente bloqueador de anuncios de Chrome va por el mismo camino: una simple modificación que pueden hacer para mejorar la web para sus usuarios.
Pero esa no es la única razón por la que Google está haciendo este cambio.
El despertar de la fuerza del mercado
Google regala muchas cosas. Chrome y Android, por ejemplo, están disponibles gratuitamente para quien sea que los quiera. Pero Google no es una caridad. Sea lo que sea que dicen las entradas de blogs y lo que comenta la prensa, todo lo que Google hace está motivada por los ingresos, algo que comparten con cualquier otra compañía con fines de lucro.
El software de Google es sorprendentemente popular, pero ellos no hacen dinero por medio de ventas. Google tiene básicamente una fuente de ingresos: su dominio casi entero de la publicidad en línea.
Los softwares bloqueadores de anuncios como Adblock Plus y uBlock Origin han amenazado estos ingresos. Cada usuario que instala un bloqueador de anuncios es un usuario que no le está generando ingresos a Google, y el bloqueo de anuncios se ha vuelto mucho más común debido a que los anuncios en sitios web se han vuelto muy molestos.
Por medio del castigo de sitios web que usan anuncios terribles, Google posiblemente espera reducir la oleada de usuarios que deciden instalar bloqueadores de anuncios. Y el dominio del navegador Chrome le da a Google este poder.
¿Debería confiársele este poder a Google?
Google está sentando un precedente con este cambió. Ahora, Google decidirá qué sitios obtendrán o no obtendrán ingresos de los usuarios de Chrome. En vez de bloquear anuncios en específico, Chrome bloqueará todos los anuncios en un sitio que no cumpla con los estándares. La razón específica por esto puede ser benéfico para los consumidores a corto plazo. Pero ¿Qué pararía a Google de abusar de este poder después?
La reciente disputa de Amazon/Google por vender aparatos de streaming muestra que Google está dispuesta a favorecer a las plataformas dominantes para poder ajustar cuentas con las otras compañías tecnológicas- incluso si los consumidores salen perjudicados en el proceso. El bloqueador de anuncios de Chrome le dará a Google la habilidad de herir los ingresos de cualquier rival e-n línea que tenga, instantáneamente. ¿Sería descabellado creer que ellos podrían usar ese poder en alguna disputa futura que tengan?
Puede sonar paranoico, pero vale la pena pensarlo un rato. Algo como esto era necesario. Estos anuncios tenían que ser detenidos. Sin importar lo que pienses de Google, esto significa que la compañía ahora tiene aún mas poder para moldear la web a su gusto. Los sentimientos que tengas respecto a esto dependerán de qué tanto crees en el viejo lema de Google: “no seas malvado”.