Es oficial, Windows 8 está aquí. Microsoft llevó a cabo un evento en la ciudad de Nueva York el día de ayer con motivo de lanzar su sistema operativo. Gran parte de la presentación se habló acerca de las geniales funcionalidades nuevas, y se hizo mención de la vasta selección de hardware disponible para Windows 8. Sin embargo, algo de lo que Microsoft no hablo mucho fue la seguridad—ni las nuevas funciones de Windows 8 que mantienen tu información y tu PC seguras.
Al igual que cada versión previa de Windows, Windows 8 es la más segura hasta el momento. Realmente no hace falta decirlo, pues ahora es poco más que una estrategia de marketing. Cada nueva versión incluye las funciones en seguridad de las anteriores, pero las mejora y actualice, cubriendo riesgos potenciales que el procesador pudiera pasar por alto. Claro, no decimos que Windows 8 sea invulnerable, pero es de esperarse que sea más seguro que Windows 7 y cualquier versión posterior.
Windows 8 incluye varias funciones que lo hacen más seguro que Windows 7.
Entonces, ¿qué es lo que hace más seguro a Windows 8? Quizás la función orientada a la seguridad más importante en Windows 8 es una que, curiosamente, no tiene nada que ver ni con Microsoft ni con Windows: El UEFI, siglas en inglés para Interfaz Unificada de Firmware Extensible (Unified Extensible Firmware Interface). El UEFI es un Nuevo estándar que pretender reemplazar al arcaico BIOS encontrado típicamente en el hardware de PC.
El UEFI ha existido desde hace un tiempo, pero los sistemas creados para Windows 8 (y Windows Server 2012) son los primeros en aprovechar las ventajas que UEFI ofrece en cuanto a autenticación pre-arranque. Básicamente, UEFI solo permitirá el uso de software con certificados de seguridad válidos y reconocidos, por lo que previene rootkits u otra clase de malware que intente ejecutar un arranque de la máquina.
Después, tenemos Windows Defender. Si ya estás usando Windows Vista o Windows 7, o si has descargado la aplicación gratuita para Windows XP, entonces quizás ya estés familiarizado con Windows Defender. Versiones previas de Windows Defender han sido estrictamente anti-spyware, mientras que Microsoft ofreció una aplicación separada que para una protección anti-malware más generalizada, llamada Security Essentials. Ahora, en Windows 8, ambas han sido combinadas, de modo que Windows Defender se ha convertido en una aplicación que ofrezca un más amplio rango de protección.
Windows Defender es parte de Windows 8, y además está activado por defecto, por lo que obtendrás protección desde el primer momento. Sin embargo, Microsoft permite OEMs para deshabilitar y reemplazar la protección de Windows Defender con herramientas de terceros. Así que si compras un equipo de Best Buy o Wal-Mart existe la posibilidad de que venga con alguna versión de prueba de Norton u otro anti-virus pre-instalado.
Sin embargo, Windows Defender estará ahí, solo necesitas activarlo. Wolfgang Kandek, Jefe de Tecnologías en Qualys, señala que Windows Defender es una herramienta orientada al uso del consumidor promedio. “Empresas y organizaciones, que típicamente requieren aplicaciones capaces de un mayor control, como reportes de estado y alertas de malware neutralizado, requerirán buscar otras opciones, que cubran las necesidades en este rubro propias de una empresa”.
Con Windows 8, Microsoft usa la protección SmartScreen—la cual ha sido una herramienta muy efectiva para proteger a sus usuarios contra descargas maliciosas hechas en Internet Explorer- y se extiende, ahora, al sistema operativo completo. Ahora, SmartScreen te advertirá y protegerá incluso si usas otro navegador, como Firefox o Chrome, o simplemente si estás descargando un archive a través de la red.
Para las empresas que usen Windows 8, el sistema Dynamic Access Control ha sido ampliamente mejorado. Actualmente, Dynamic Access Control permite a los administradores restringir el acceso a archivos y carpetas basándose en grupos de usuarios, o usuarios individuales. El nuevo Dynamic Access Control le da al administrador mucho más control, permitiendo que el acceso sea definido por virtualmente cualquier atributo de directorio activo.
Por ejemplo, el viejo Dynamic Access Control permite que una organización determine qué usuarios y grupos pueden acceder a una carpeta determinada. El nuevo Dynamic Access Control permite que la organización otorgue el acceso a una carpeta determinada a un individuo que esté usando un iPad autorizado por la compañía, pero previene que el mismo individuo tenga acceso a la misma información desde un iPad personal.
Otro aspecto de Windows 8 que contribuye a una mejor seguridad es su enfoque a Windows App Store. Microsoft quiere que tanto usuarios individuales como organizaciones migren al uso de apps, desarrolladas a trabajar dentro de la nueva interfaz de la pantalla de inicio (el único software que correrá con Windows RT). Además, las apps disponibles en la App Store serán revisadas y escaneadas, por lo que son más seguras.
Kandek concluye diciendo: “Personalmente, pienso ser de los primeros en actualizarme a Windows 8 en mi equipo personal”. Viniendo de un ejecutivo encargado de la seguridad de una compañía, eso dice mucho acerca de Windows 8.