Kaspersky Anti-Virus 2015 ofrece un gran abanico de seguridad para tu equipo Windows. Además de su PC antivirus gratuito, cuenta con otras versiones premium disponibles, de entre los que vamos a poner a prueba su producto de nivel de entrada. Kaspersky Anti-Virus 2015 funciona bien en Windows 8.1. Aprovecha la información procedente de la mayor comunidad de usuarios de Kaspersky para identificar las nuevas amenazas. También podrás disfrutar de protección contra virus en tiempo real, una función de restauración que deshace el trabajo sucio hecho por el malware y un monitorizador de navegador web.
Kaspersky Anti-Virus 2015 cuesta 29,95€ al año. El pack de Internet Security añade a ello un firewall doble, protección en las transacciones, control parental y protección contra robo por 20€ más al año. Por 30€ más, puedes tener Kaspersky Total Security, que cuenta con todo lo ya mencionado más administración remota de dispositivos, protección de contraseñas adicional, una utilidad de destrucción de archivos y copia de seguridad online de archivos confidenciales. Si queréis ver un desglose visual de las características de cada una de las versiones, podéis hacerlo aquí.
En los tests de laboratorio hechos por Virus Bulletin, Kaspersky Anti-Virus puntuó mejor que Avast en pruebas reactivas y proactivas, pero peor que Bitdefender, Avira y AVG. En las comparativas de protección en entorno real de AV-Comparatives, Kaspersky se comportó bastante bien, obteniendo el cuarto lugar por detrás de Bitdefender y Trend Micro y sin falsos positivos. Kaspersky también lo hizo bien en el AV-Test, con un 6 de 6 en protección, rendimiento y usabilidad. En general, Kaspersky ha demostrado ser capaz de superar el desafío en los tests de virus y malware.
Además de analizar en busca de virus y mantener las definiciones de amenazas actualizadas, Kaspersky tiene tablas de actividad a través de detallados informes. Se puede profundizar en un registro de actividades completo y aplicar filtros en base a lo que se quiera ver, así como seleccionar rangos de fechas. La red de usuarios de Kaspersky proporcionan un inventario de definiciones de virus en la nube que asegura que las nuevas amenazas sean identificadas lo antes posible. Un análisis completo lleva sobre media hora. Kaspersky no se muestra particularmente hábil a la hora de programar análisis regulares por sí solo, pero puede ejecutar un análisis de rootkit en mitad de las tareas de trabajo, pero es posible controlar cuándo Kaspersky puede hacerlo. También se puede dar prioridad a Kaspersky sobre otras aplicaciones de escritorio. Una consola basada en red permite ver el estado de los dispositivos conectados de un vistazo.
Una de las funciones más interesantes de Kaspersky es su teclado virtual seguro, que permite introducir claves y PINs sin miedo a que información sensible caiga en manos de keyloggers. Un escáner de vulnerabilidades separado puede analizar la configuración del sistema a través del cual un virus podría operar, y ofrece soluciones fácilmente accesibles. Existen diagnósticos en esta línea específicamente diseñados para Internet Explorer para mejorar la seguridad de navegación. También existe un eliminador disponible que borra todo rastro de cookies que pudiera permanecer en tu navegador. Las marcas que indican la seguridad de un link en los resultados de búsqueda son visualmente menos desagradables que los que hemos podido ver en otros programas antivirus.
Resultado final
Kaspersky goza de una interfaz suave y pulida, y cuenta con algunos ases bajo la manga que no encontrarás en otro lugar. Las pruebas de protección en laboratorio muestran que Kaspersky puede manejas sus cosas, y ciertamente creemos que está a la altura.
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