El otro día elaboré una lista de Preguntas y Respuestas para cambiarse de Windows a la Mac, y bajo el rubro; «utilerías que usted debe tener» se enumera una herramienta antivirus. Mientras que muchos entendieron la lógica de esto y estuvieron de acuerdo con mi decisión, había algunos a los que les pareció una indulgencia tonta.
No lo es. De hecho, la elección de no ejecutar antivirus en un Mac es una decisión estúpida que la gente elige basada nada más que en el idealismo fanático, y no tiene cabida en el mundo real. Doblemente mas si tu Mac la llevas al lugar de trabajo.
He aquí por qué.
Considero que la seguridad es una parte importante del poseer computadoras. La seguridad para mí significa mantener a salvo mi equipo, manteniendo mis datos seguros, manteniendo mi red segura, y mantener a la gente a mi alrededor a salvo. Soy un creyente de que la vigilancia es una herramienta vital en la lucha contra el malware, y que la aplicación de parches de seguridad en el momento oportuno da beneficios de largo plazo hacia el mantenimiento de una plataforma segura.
Pero también estoy plenamente consciente del hecho de que no existe el código de software seguro. Los sistemas operativos son enormes, y no importa si ese código fue escrito en Redmond o Cupertino o en otro lugar, estará plagado de errores. Windows XP existió durante más de una década, y recibió tres paquetes de servicio y un sinnúmero de parches, pero los bichos seguían apareciendo. Los errores de código parchado representa sólo la punta del iceberg cuando se trata de las vulnerabilidades reales presentes en el código al que estamos expuestos y utilizamos a diario.
Si usted cree que su sistema operativo es seguro, se está engañando a usted mismo. Y si usted trata de decirle a los demás de que su sistema operativo elegido es mejor que el de otra persona, usted está tratando de engañar a los demás y no se sorprenda si la gente piensa que usted es un tonto.
Cuando se trata de malware, no lo quiero presente en mis sistemas, yo no lo quiero que habite en mis sistemas, y no quiero pasar el malware a otros. Ese es el plan, y yo trabajo a lograrlo mediante la adopción de un enfoque de tres vertientes:
- La vigilancia y la atención en lo que puedo descargar e instalar, que lugares visito en la web, y a quien le permito acceder a mi sistema.
- Aplique los parches de manera oportuna. No instalar un parche – a menos que tenga una muy buena razón – es demencial.
- Mantenga un antivirus en funcionamiento para analizar los archivos que existen o pasan a través de mi sistema.
La última etapa es importante no sólo porque protege mi sistema contra malware – y créanme cuando digo que existe malware para Mac, no en la misma cantidad que el malware para Windows – pero también escanear en busca de malware de Windows, lo que me impide transmitir cosas desagradables a otras personas. Un poco de memoria RAM y algunos ciclos de CPU es un pequeño precio a pagar para conseguir un ojo independiente vigilando los bits que fluyen en mis Macs. De acuerdo, sólo parece que se ha atrapado malware para Windows, pero incluso poner eso en cuarentena ayuda a mantener mi red en seguridad, y evita por mi parte el envío inadvertido de código malo a los demás.
Comprendo que un antivirus pude ser costoso, pero no puedo entender la mentalidad detrás de gastar cientos – si no miles – de dólares en hardware, y luego pintarme una gran marca de “tiro al blanco” para los hackers y otros pillos. E incluso si la compra de la Mac te ha dejado corto de dinero, hay muchas alternativas gratuitas disponibles para elegir.
Así que no seas estúpido, y ejecute un antivirus en su Mac.
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